Ciberacoso: una grave amenaza en línea para los niños

31 de agosto de 2020 By nick anderson Sin comentarios 5 minutos

La intimidación es un comportamiento antiguo que continúa siendo un problema para niños y adolescentes. Es un caso frecuente de intimidación física y comentarios delicados que los maestros y los padres tratan de abordar en todo momento. El acoso tiene efectos a largo plazo en el bienestar mental y físico de un niño. La Internet - redes sociales en particular, ha permitido a las personas conectarse con amigos o hacer nuevos amigos de todo el mundo. La oportunidad de construir relaciones nuevas y significativas a menudo puede tomar un giro oscuro, que puede perseguir a una persona durante mucho tiempo.

Cyberbullying

El término Cyberbullying sigue apareciendo. Porque como el bullying, en realidad, el ciberbullying es igualmente peligroso, más si tenemos en cuenta que la información vuela rápido en internet. Una vez que algo está en Internet, se queda allí.

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El ciberacoso es un asunto serio

La intimidación es el acto de abusar verbalmente, hacer comentarios despectivos, amenazar, intimidar o cualquier cosa que sea hiriente para alguien. El término cibernético se refiere al uso de equipos digitales e Internet como medio de comunicación para publicar mensajes de naturaleza insensible a otra persona.

Hubo un tiempo en que la intimidación se limitaba a los confines del pasillo de la escuela, el salón de clases después de una sesión, el baño de la escuela o el patio de recreo, pero los tiempos han cambiado. Con la proliferación de teléfonos inteligentes y los avances en tecnologías celulares y velocidades de banda ancha, nuestras vidas se han conectado digitalmente. Casi todo el mundo hoy en día tiene al menos una cuenta de redes sociales. Es un desafío para los padres estar atentos a los sitios web y foros que visitan sus hijos y con qué personas interactúan. Controles parentales han permitido una moderación estricta y limitaciones en las aplicaciones, pero los adolescentes tienen la edad legal para usar las redes sociales sin supervisión.

Lo que hace que el ciberacoso sea tan peligroso es la seguridad que brinda a los acosadores. No se necesita mucho para configurar una cuenta falsa y filtrar información privada o publicar comentarios hirientes. A diferencia del acoso en la vida real, donde puede tener graves repercusiones, el ciberacoso es mucho más difícil de controlar.

Cómo el acoso cibernético amenaza la seguridad de los niños

Los acosadores a menudo tienen poco o ningún remordimiento o entienden la gravedad de sus acciones. Los acosadores cibernéticos pueden publicar comentarios sobre el género, la raza, el origen étnico o la sexualidad de una persona. Muchas personas no revelan ciertos detalles sobre sí mismas por temor a que se burlen de ellas en línea, y eso es lo que usan los ciberacosadores para vengarse de esas personas. La información que puede haberle confiado a alguien puede llegar a filtrarse, lo que lleva a situaciones no deseadas.

Se pueden crear cuentas falsas a nombre de alguien para difamar o publicar textos o fotos personales. Tiene consecuencias nefastas en la salud mental de una persona. Debido a la naturaleza de tales situaciones, se vuelve muy difícil para los niños y adolescentes hablar al respecto. El resultado es una batalla que tienen que pelear solos.

El acoso cibernético es otro problema grave del que los padres deben estar atentos. Los pedófilos se aprovechan de objetivos desprevenidos y atraerlos para que establezcan confianza. Como nuevo usuario de Internet, es posible que su hijo no tenga los conocimientos suficientes para identificar la situación. Es usted, el padre, quien debe vigilar de cerca la cuenta de redes sociales del niño: bandeja de entrada, amigos, comunidades.

La humillación constante en público o entre amigos puede bajar la autoestima. Afecta directamente el estado de ánimo y la capacidad de rendir al máximo en áreas como la educación.

Cómo saber si su hijo está siendo intimidado

Hay algunos signos claros cuando una persona sufre estrés mental, que también se manifiesta en estrés físico en algún momento.

Observe si el niño se ha visto estresado últimamente. El estrés mental puede causar falta de sueño, falta de hambre y la capacidad de comunicarse de manera coherente. Pueden sentirse agitados por preguntas pequeñas o evitar interacciones. Estas son suficientes señales de que algo está preocupando a la persona desde adentro. Tener una discusión abierta sobre cualquier evento reciente lo ayudará a saber si el niño ha sido acosado en línea. No hay nadie mejor que usted para conocer al niño, por lo que el mejor enfoque depende de usted. Puede tomar un tiempo antes de que el niño se abra.

Si tiene acceso a la cuenta de redes sociales del niño, busque publicaciones recientes de amigos o revise la bandeja de entrada.

También es igualmente importante saber que su hijo no es un acosador cibernético. Es más difícil saberlo, pero si te encuentras con algún mensaje en línea publicado por el niño, o hay una denuncia, debes actuar en consecuencia. matones

Informar el acoso cibernético

Si ha sido acosado en línea, lo primero que debe hacer es decirle al acosador que se detenga. Dile a tus padres si continúa más allá de ese punto. Involucrar a un adulto en el asunto es algo que debes hacer. Mantenga los mensajes almacenados como evidencia.

Como padre, puede consultar las leyes cibernéticas locales para conocer las disposiciones sobre el acoso cibernético. Si el niño ha sido amenazado en línea o ha enviado mensajes de naturaleza sexual no solicitados, o se han filtrado fotos personales, entonces las leyes cibernéticas lo ayudarán a rastrear a los culpables ante la justicia. En los Estados Unidos, las leyes difieren de un estado a otro. Algunos estados obligan a las escuelas a establecer políticas para abordar el acoso escolar.

Conclusión

A medida que su hijo crece para explorar Internet, debe recibir educación sobre las diversas amenazas que pueden enfrentar en línea. Los niños que son capaces de identificar el acoso y el acoso tienen más probabilidades de informarlo a los padres. La seguridad de su hijo en línea debe ser primordial.